El helado es el alimento veraniego por excelencia y la mayoría de nosotros no tenemos intención de renunciar a él aunque necesitemos controlar el peso. Veamos si realmente el helado engorda y cómo comerlo aunque estés a dieta.
El helado parece ser un alimento de orígenes antiguos, pero el helado “moderno”, que es el que se compone principalmente de leche, azúcar y huevos, tiene orígenes españoles y como buenos españoles no queremos privarnos de este alimento .
De hecho es un comida completa, tanto es así que el helado siempre es sinónimo de engordar y los que se ponen “a dieta” ya saben que tendrán que prescindir de él. Pero en las cantidades adecuadas y con algunas precauciones no podemos renunciar al placer de disfrutar de un helado fresco y gratificante, sobre todo en los días de verano. Veamos entonces como comer helado sin engordar.
¿Comer helado engorda?
Como con todos los alimentos, no sería correcto decir que el helado engorda, ni decir lo contrario, es decir, te hace adelgazar. De las formas adecuadas es posible disfrutar del helado sin temor a tener que abandonar la fila.
Dado que la composición de los diferentes tipos de helado es muy variable, es difícil establecer cuál es su contenido calórico, pero con una buena aproximación podemos decir que 100 gramos de helado contienen de 200 a 300 calorías.
un helado es compuesto normalmente a partir de leche, azúcar y huevos, además de otros ingredientes que pueden variar desde fruta fresca hasta cacao, nata, frutos secos y por tanto contiene proteínas y grasas derivadas de la leche y huevos y azúcares y lo que marca la diferencia es precisamente la naturaleza y cantidad de los ingredientes añadidos.
Un helado que contenga avellanas o almendras o nata será sin duda más calórico y rico en grasas que un helado que contenga fruta fresca. Además de las grasas formadas por la leche, los huevos y la nata, existen naturalmente las formadas por cualquier aceite vegetal con el que se enriquecen algunos tipos de helados. Este es el caso de muchos helados industriales envasados.
Puramente teóricamente El helado artesanal es más saludable que el helado industrial, porque debe estar elaborado con materias primas frescas y sin la adición de aditivos, que en cambio se suelen encontrar en los helados industriales, que muchas veces también contienen aceites vegetales que aumentan su cremosidad, pero desde el punto de vista calórico para la misma cantidad, el contenido de energía es el mismo o casi el mismo.
Una ración de 100 g de helado de nata contendrá alrededor del 35% de hidratos de carbono, casi todos en forma de azúcares simples, el 55% de lípidos (de varios tipos, como acabamos de mencionar) y alrededor del 10% de proteínas. Por tanto, dado el alto contenido en azúcares simples y grasas el helado no puede ser considerado un reemplazo de comida, pero aún puede incluirse en una dieta variada y equilibrada.
¿El helado vegano engorda menos que el helado tradicional?
En cambio, se debe hacer una discusión separada para el helado vegano, es decir, aquel helado que está desprovisto de ingredientes de origen animal, por lo que no contiene ni leche ni huevo y es generalmente a base de agua o leche vegetal. Normalmente el helado vegano contiene menos calorías que el helado tradicional, de hecho, estamos hablando de 100-150 calorías por cada 100 gr, dependiendo de los ingredientes que se utilicen.
El helado vegano a base de soja, por ejemplo, sigue teniendo un alto contenido de proteínas, incluso si carece de leche y huevos. En cuanto al contenido de azúcar, sin embargo, no es seguro que el helado vegano contenga menos que el tradicional.
Por otra parte, el helado vegano no es necesariamente más saludable que el helado tradicional, porque depende de la calidad de los ingredientes que la componen. Por ejemplo, si el helado vegano es rico en grasas vegetales hidrogenadas, ¡seguramente no será una buena opción para nuestra salud!
En conclusión, el helado vegano, si se elabora con ingredientes de buena calidad, puede ser más adecuado para aquellas personas que siguen una dieta de adelgazamiento o que quieren reducir el aporte calórico de la dieta.
¿Cuánto helado comer para no engordar?
Ahora veamos en la práctica cómo podemos disfrutar de un delicioso helado sin preocuparnos de que se acumule grasa en las caderas o el estómago. En primer lugar, como hemos señalado muchas veces, no existen recetas milagrosas, sino que basta el sentido común y entender que un estilo de vida saludable y la actividad física son la base de todo.
El ideal seria elige un helado artesanal, también vegano, elaborado con ingredientes frescos para evitar el riesgo de añadir aditivos y grasas hidrogenadas y posiblemente con fruta para que haya un componente graso menor.
Las frutas que encajan bien son limón, fresa, sandía, coco, bayas, que seguramente hará que el helado sea menos calórico que el chocolate. La cantidad que tomamos también es importante: dos bolas, preferiblemente en una taza y no en la galleta, podrá satisfacer nuestro paladar en beneficio de nuestra línea.
Una frecuencia de no más de dos veces por semana será el más adecuado para no excederse con los azúcares, preferiblemente para la merienda en lugar de la merienda habitual y no además de una comida completa.
Por último, de vez en cuando, en los calurosos días de verano fuera de casa, podemos comer helado en lugar de una comida, por ejemplo en el almuerzo, mejor si lo acompañamos de una fuente de fibra, que bajará la absorción de azúcares, como un 'ensalada verde fresca. Con estas pequeñas pero importantes precauciones, podremos comer helado sin correr el riesgo de subir de peso, manteniendo así nuestro peso ideal!
